El etíope Imane Merga, un especialista en 5.000 metros, arrebató a Kenia su título más querido, el Mundial de cross, con un esprint que no obtuvo respuesta de sus tres rivales kenianos que le acompañaron hasta las inmediaciones de la meta
La carrera de 12 kilómetros cuando el sol calentaba el circuito a unos 21 ºC empezó a un ritmo más lento que la júnior. A mitad de carrera en el tercer paso por meta (6km), Kenia había limpiado el grupo de arriba, ahora formado por diez, pero Etiopía tomaba posiciones en cabeza.
Lamdassen no dejaba en su objetivo de ganar puestos de honor y al paso por el octavo kilómetro era decimotercero.
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